El inicio en marzo 2020 de la pandemia del COVID-19 en el Perú, generó una emergencia sanitaria con gran impacto tanto en la salud pública como en muchos aspectos de la sociedad y la población en general. El Gobierno Peruano estableció la inmovilidad total de la población a las dos semanas de iniciado el brote. Desde el inicio de la pandemia, el Gobierno estableció un Comité COVID-19 con la participación del Ministerio de Relaciones Exteriores, Ministerio de Salud y otros miembros encargados de explorar la vía más rápida de introducir una vacuna contra el virus SARS-CoV-2 en el país.
El Ministerio de Salud conformó el Comité Nacional Transitorio de Ética en Investigación para la Evaluación y Supervisión Ética de los Ensayos Clínicos de la Enfermedad COVID-19 (CNTEI-COVID-19), con la intención de hacer más eficiente la revisión delos ensayos clínicos de tratamientos y vacunas contra el virus SARS-CoV-2. 

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Algunas Precisiones en Torno al Informe: "Uso de Vacunas como Respuesta a una Emergencia Sanitaria - Lecciones Aprendidas del Caso Peruano"

El 23 de Octubre de 2023 la Academia Nacional de Medicina publicó el informe “Uso de Vacunas como Respuesta a una Emergencia Sanitaria: Lecciones Aprendidas del Caso Peruano”, producido en principio por una comisión interna, en la que participaron invitados internacionales. El trabajo de la comisión buscó analizar éticamente lo ocurrido en torno al ensayo clínico en el que se evaluó la eficacia y seguridad de dos vacunas experimentales contra el SARS-COV-2 representadas por la entidad gubernamental china Sinopharm, en medio de cuyo desarrollo se suscitaron eventos que terminaron siendo conocidos como ‘Vacunagate’. Dicho análisis, además, estaría enfocado en la identificación de lecciones a considerar para el futuro.

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